Hoy he visto el documental emitido hace unos días por Telemadrid "Ciudadanos de Segunda" en el que se denuncia la supesta discriminación del castellano en Catalunya en favor del catalán.
http://www.youtube.com/watch?v=UB9DehZYEAw
Pobres me han parecido los argumentos para defender una escolarización exclusiva en castellano. Paupérrimos y de una ignorancia supina. También me lo parecerían los que lo hicieran en el sentido opuesto, solo que no los hay. Por tanto el testimonio de Carmelo González me parece totalmente prescindible, e incluso creo que le hace un flaco favor al documental. No se preocupe Carmelo, su hija aprenderá igual de bien la lengua de Llul (un poeta "de pueblo", como dice usted) y la de Cervantes. Siempre y cuando usted no atente contra su educación y se lo impida.
Defender la incultura me parece el peor de los pecados. Citar a Ovidi Montllor en la forma que lo han hecho no hace sinó darle más fuerza y razón a su cita. Muy triste.
Francisco Caja tampoco aporta demasiado a la trama, más que controversia y episodios trepidantes de agresiones, amenazas y capuchas. Profesor, si con más de treina años viviendo en Catalunya y trabajando en la universidad no se ha dado cuenta de la realidad social del país, creo que debería ir con cuidado antes de hacer apariciones públicas, pues le da una mala imagen a la universidad de Barcelona, a la universidad catalana y a la española.
Pero lo más alarmante són la sarta de mentiras que se encadenan en el reportaje en cuestión. ¿Por qué en vez de quedarse con el cartelito del restaurante no entran y hablan con el propietario, los trabajadores y los clientes? Quizás entonces no les pareceria tan amenazada la situación de la lengua de Lorca. La patraña sacada de contexto de los pobres escolares a la salida del colegio que contestan a las maliciosas preguntas de la señorita reportera también me ha parecido de lo más esperpéntico. Solo faltaba el maestro con la vara de fresno (y la Senyera en él pintada, claro)
En Catalunya todo el mundo sabe castellano y todo el mundo lo habla y escribe correctamente. Igual, como mínimo, que en el resto de España. Y digo como mínimo, porque el que aprende una lengua extrangera para hacerla propia (como seria el caso del catalán para los castellanoparlantes en Catalunya, y el castellano para los catalanoparlantes en el mismo país), para hacerla su lengua materna, suele ahondar más en la gramática que el que la aprendió des de chiquito jugando en la calle. Y si alguien lo duda, me ofrezco para hacer una competición de análisis sintáctico, vocabulario o cualquier otra disciplina lingüística.
Y al fin y al cabo, lo que olvida el reportaje es que la lengua, las lenguas, estan hechas para entenderse. No para hacer política ni dividir. En vez de maravillarse por la diversidad y las coincidencias curiosas (que en Nepal haya una montaña llamada Macha Puchare y en Perú una llamada Machu Picchu, a mi me parece curioso) se dedican a meter zizaña. Que perdida de tiempo.
Los españoles, los catalanes. Los catalanes y los españoles...
Cuan fàcil it would be si tutti sepiamo ce que c'est vraiment important:
http://www.youtube.com/watch?v=UB9DehZYEAw
Pobres me han parecido los argumentos para defender una escolarización exclusiva en castellano. Paupérrimos y de una ignorancia supina. También me lo parecerían los que lo hicieran en el sentido opuesto, solo que no los hay. Por tanto el testimonio de Carmelo González me parece totalmente prescindible, e incluso creo que le hace un flaco favor al documental. No se preocupe Carmelo, su hija aprenderá igual de bien la lengua de Llul (un poeta "de pueblo", como dice usted) y la de Cervantes. Siempre y cuando usted no atente contra su educación y se lo impida.
Defender la incultura me parece el peor de los pecados. Citar a Ovidi Montllor en la forma que lo han hecho no hace sinó darle más fuerza y razón a su cita. Muy triste.
Francisco Caja tampoco aporta demasiado a la trama, más que controversia y episodios trepidantes de agresiones, amenazas y capuchas. Profesor, si con más de treina años viviendo en Catalunya y trabajando en la universidad no se ha dado cuenta de la realidad social del país, creo que debería ir con cuidado antes de hacer apariciones públicas, pues le da una mala imagen a la universidad de Barcelona, a la universidad catalana y a la española.
Pero lo más alarmante són la sarta de mentiras que se encadenan en el reportaje en cuestión. ¿Por qué en vez de quedarse con el cartelito del restaurante no entran y hablan con el propietario, los trabajadores y los clientes? Quizás entonces no les pareceria tan amenazada la situación de la lengua de Lorca. La patraña sacada de contexto de los pobres escolares a la salida del colegio que contestan a las maliciosas preguntas de la señorita reportera también me ha parecido de lo más esperpéntico. Solo faltaba el maestro con la vara de fresno (y la Senyera en él pintada, claro)
En Catalunya todo el mundo sabe castellano y todo el mundo lo habla y escribe correctamente. Igual, como mínimo, que en el resto de España. Y digo como mínimo, porque el que aprende una lengua extrangera para hacerla propia (como seria el caso del catalán para los castellanoparlantes en Catalunya, y el castellano para los catalanoparlantes en el mismo país), para hacerla su lengua materna, suele ahondar más en la gramática que el que la aprendió des de chiquito jugando en la calle. Y si alguien lo duda, me ofrezco para hacer una competición de análisis sintáctico, vocabulario o cualquier otra disciplina lingüística.
Y al fin y al cabo, lo que olvida el reportaje es que la lengua, las lenguas, estan hechas para entenderse. No para hacer política ni dividir. En vez de maravillarse por la diversidad y las coincidencias curiosas (que en Nepal haya una montaña llamada Macha Puchare y en Perú una llamada Machu Picchu, a mi me parece curioso) se dedican a meter zizaña. Que perdida de tiempo.
Los españoles, los catalanes. Los catalanes y los españoles...
Cuan fàcil it would be si tutti sepiamo ce que c'est vraiment important: